El fin de semana pasado se realizó en Corrientes el 38 encuentro plurinacional de mujeres y diversidades. En él se concentraron todos los sectores activistas del feminismo, así como las principales organizaciones y partidos políticos del país para discutir qué estrategia debe darse el movimiento feminista para enfrentar a Milei y defender nuestros derechos conquistados en los últimos años.

El debate por la estrategia

El encuentro en Corrientes fue más bien chico, pero lleno de activistas, estudiantes, trabajadoras, feministas con muchas ganas de debatir. Eso se reflejó en que los talleres fueron grandes y con mucho debate político sobre como enfrentar a Milei para defender nuestros derechos. No existe en Argentina otro espacio donde la vanguardia se reúne y debate. Donde nos encontramos estudiantes de cientos de universidades, trabajadoras de la industria, estatales y de servicios, para debatir qué hacer. Sí bien el movimiento feminista viene en cierto retroceso en movilización y organización, por responsabilidad del peronismo, se vuelve a demostrar que por el dinamismo y la masividad que tuvo y por haber conquistado el derecho al aborto, está lleno de pibas y pibis que quieren debatir como volver a estar organizadas y en las calles. Un ejemplo de esto fue que la primera intervención en el taller de aborto fue por parte de una estudiante de aproximadamente 20 años que preguntó cómo se milita hoy en la campaña para defender el aborto. Dando cuenta de qué la pregunta por el qué hacer fue transversal a toda la discusión.

Sin embargo, el encuentro no carece de sus límites. En primer lugar, tiene una dirección burocrática que está en manos del PCR, quienes permanentemente buscan que el encuentro no sea político ni defina ninguna estrategia de lucha.

Esto se vio claramente en el acto de apertura. Mientras muchas nos encontramos a la espera del documento, la comisión organizadora nos tuvo esperando más de dos horas y media al rayo del sol sin leerlo.

Desde la OST, junto a otras activistas, peleamos para que se leyera el documento (frente a un anfiteatro semi vacío) antes de que se siguiera vaciando el acto. Logramos imponerles que lo leyeran antes de lo que el PCR y la comisión organizadora querían. Sorpresivamente el documento daba cuenta de todas las luchas que se llevaron a cabo contra el gobierno nacional, así como también mencionó a Palestina. Es decir, no querían leerlo frente a toda la vanguardia activista y militante que se había congregado en Corrientes, esperaron a último momento para vaciar el acto de apertura. Sin embargo el documento no mencionaba ni exigía el llamado a paro general de las centrales sindicales para enfrentar las reformas que prepara Milei, así como tampoco ofrecía ningún plan de lucha o acción concreta para salir a enfrentar al gobierno. 

En los talleres se dieron dos debates en paralelo sobre cómo enfrentar al gobierno y qué hacer como feminismo frente a lo que se viene. Es decir, qué hacer frente a las reformas reaccionarias como la laboral, la educativa o la tributaria que quiere imponer Milei, y en ese sentido, cómo defender nuestras conquistas como el acceso al aborto o la ESI. 

Por un lado, y lo que estructuró la discusión política de los talleres, fue el debate con la estrategia del peronismo que no ve posibilidad de derrotar este plan de gobierno, echándole la culpa a la sociedad porque voto a Milei, y solo proponen esperar a 2027 y votar bien. Es decir, solo se quedan en la denuncia sin proponer un plan de lucha. Llegaron a argumentar que “estamos cansadas para luchar” y de esta manera desmoralizar a los sectores que luchan o quieren luchar contra este gobierno. Así están preparando el terreno para traicionar a la clase obrera y el conjunto de los sectores oprimidos y explotados dejando pasar las reformas. Esto se vio claramente en el taller de organización sindical que se dividió en 4 talleres de más de 40 compañeras de diversos sindicatos. El argumento de los sectores burocráticos era que la clase obrera votó a Milei, por eso no podes plantear un paro general porque va a fracasar. Lo mismo en el taller de universidad, la dirigencia de CONADU nos decía que los trabajadores no quieren parar, algo totalmente falso porque lo que no quieren los compañeros es parar sin un plan de lucha coherente que tenga continuidad. La estrategia de la burocracia es paro sin movilización y movilización sin paro, lo que lleva a vaciar la lucha.

Ahí fuimos bien duras y claras desde la OST, planteamos que el movimiento feminista tiene que volver a construir ese movimiento que supo conquistar el aborto, y para eso debemos volver a los métodos que nos llevaron a esa victoria: organizarnos desde abajo en todos los lugares de trabajo y estudio junto a nuestros compañeros para frenar la reforma laboral y todas las contrarreformas que prepara Milei. Sí pasa la reforma laboral, el gobierno tiene el camino allanado para ir por el derecho al aborto, la ESI, la ley de identidad de género, la caratula de femicidio, el matrimonio igualitario, etc. En cambio, si somos las y los trabajadores, el movimiento feminista y el movimiento estudiantil quienes le ponemos un freno estamos en mejores condiciones para pasar a la ofensiva e imponerle al gobierno nacional que destine presupuesto real para garantizar los abortos en los hospitales, refugios para las victimas de violencia, aumento de salario, etc.

Por otro lado, y en consonancia con ese debate, aparecieron con fuerzas las Socorristas en red en el taller de estrategias para acceder al aborto, planteando que si no se cumple la ley hay que volver a lo que se hacía antes de que exista, acompañarnos entre nosotras y realizar abortos caseros en nuestras casas. Es decir, las socorristas nos proponen que no le peleamos nada al Estado,  que no organicemos la fuerza que tenemos como movimiento. Incluso en varias intervenciones le echaron la culpa al sistema público de salud por la imposibilidad de acceder a un aborto legal. La salida que nos proponen es que nos resignemos y nos encerremos en nuestras casas nuevamente. Sin embargo, sus intervenciones no tuvieron mucho lugar ya que fueron las propias trabajadoras de la salud quienes les contestaron y expresaron la situación de precarización que hay en el sistema de salud.

Es justamente con esas compañeras con las que nos tenemos que organizar para garantizar el acceso al aborto legal, siguiendo el ejemplo del Garrahan que viene de un triunfo muy importante y le muestra al resto de los trabajadores como organizarse y pelear para ganar. 

El otro debate que se expresó en el encuentro fue el de la elección de la próxima sede, que está relacionado a si es posible o no enfrentar a Milei. Ya sabemos que el método del aplausometro es una maniobra del PCR para evitar discutir seriamente la sede del encuentro, y este año eso quedó demostrado en un escandaloso acto de cierre. Mientras que la mayoría de las activistas y referentes históricas subieron al escenario a plantear que la próxima sede sea CABA para llenarle Plaza de Mayo al gobierno y golpearlo en el propio centro político del país, con el apoyo de sectores que históricamente se oponen a que sea en CABA, el PCR, acompañado por sectores del peronismo,  se negó rotundamente y a través de maniobras eligió que la próxima sede sea Córdoba de manera burocrática. Esto responde a la misma estrategia de no querer mover un pelo para enfrentar al gobierno.

Si todavía el PCR aparece como dirección de los encuentros es porque el peronismo dirige de hecho a través de esta organización. Hace años que tienen un acuerdo político a nivel nacional, van juntos en las elecciones y el PCR lleva a cabo la estrategia de desmoralización y contención que tiene el peronismo en los sindicatos y centros de estudiantes, esperando a 2027 para volver a gobernar sobre las cenizas de lo que deje Milei. 

Un encuentro que se pronunció por una Palestina libre

Otra muestra de lo politizado que fue el encuentro es el hecho de que por primera vez hubo un taller por Palestina. Resultó ser uno de los más grandes (alrededor de 150 personas cada día) y en donde se reunió toda la vanguardia feminista para discutir cómo organizarnos para apoyar y defender la causa palestina desde argentina.

Desde la OST participamos de este taller y planteamos que para luchar por la causa del pueblo palestino hay que salir a las calles a enfrentar la reforma laboral de Milei y al imperialismo. Retomamos el ejemplo de la clase obrera italiana que realizó una huelga general contra las políticas reaccionarias de Meloni y por Palestina. De ese ejemplo nos tenemos que valer para enfrentar el plan de contrarreformas del gobierno en la calle, discutiendo en cada lugar de trabajo y estudio cómo nos organizamos.

A partir de nuestra intervención se clarificó el debate con los sectores del peronismo que también participaban del taller. Quienes se dedicaron todo el tiempo a querer correr el debate argumentando que en ese taller se discutía Palestina, no la estrategia del peronismo. Pero es esa misma estrategia la que es inerte también para luchar por Palestina. Si no se sale a las calles a enfrentar al principal aliado de Netanyahu en la región y solo se dedican a esperar a 2027 desmoralizando o impidiendo cualquier acción de lucha es imposible apoyar al pueblo Palestino y aportar en esta causa de la humanidad.  Para debilitar a Netanyahu hay que derrotar a uno de sus principales aliados, Milei.

Primera participación de la OST en el encuentro pluri

Desde la OST estamos muy orgullosas de haber participado del encuentro en Corrientes de la manera en la que lo hicimos, planteando desde el principio el debate de que el feminismo tiene que volver a copar las calles contra Milei, las reformas reaccionarias y todo el imperialismo. Es la primera vez que participamos de un encuentro y pudimos aportar al debate político y también al teórico, llevando un material propio en donde planteamos la necesidad de construir un movimiento feminista que luche junto a los trabajadores por terminar con esta sociedad capitalista patriarcal. De fondo la estrategia para enfrentar a Milei responde a si se cuestiona al sistema de conjunto o no, no hay manera de derrotar su plan de gobierno si al mismo tiempo no se plantea una alternativa de gobierno en favor de los trabajadores y las grandes mayorías sociales afectando las ganancias de los empresarios que se enriquecen a costa nuestra. Eso es lo que no esta dispuesto a hacer el peronismo, por eso no enfrenta al gobierno ni prepara a los trabajadores para resistir sus ataques.

Como feministas socialistas queremos cambiar esta sociedad de raíz, planteando una alternativa socialista. Con esta perspectiva nos preparamos para el próximo encuentro en Córdoba y para salir a luchar contra el gobierno de Milei y las reformas reaccionarias. 

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